EL PORQUÉ DE MIS PEINADOS

La música popular "independiente" vista por un aficionado. Hoy el problema es el exceso de información. Podemos conseguir de modo gratuito (e ilegal) cualquier tipo de música, además de los medios de comunicación generalistas hay medios especializados incluso en concretos estilos músicales, cada vez se edita más música... En fin, que la cuestión está en seleccionar y ahí es donde entro yo. Imaginad el tiempo y dinero que os vais a ahorrar.

18.5.11

PJ HARVEY – “Let England Shake”

Cada nuevo disco PJ HARVEY es distinto al anterior y a la vez igual, de tal manera que consigue una de las cosas más difíciles en la carrera de un artista: Evolucionar sin dejar de ser uno mismo, haciéndolo además con libertad, pero con coherencia para evitar resbalones o quedarse fuera de juego. Si a ello añadimos que siempre consigue alcanzar unas cotas de calidad que van de lo bueno a lo excelente (contabilizo sólo un par de discos fallidos de diez), cae por su propio peso que estamos ante una de las mejores músicos de las últimas décadas. Las modas pasan, los focos apuntan hacia otros lados, el mercado se mueve, pero PJ HARVEY es un valor seguro, un valor refugio como el oro para los inversores. Con “Let England Shake” lo ha vuelto a hacer.

Dejando a un lado "A Woman A Man Walked By” que rubricó junto a JOHN PARISH, “Let England Shake” continúa la senda del folk de “White Chalk” aunque con una inyección de agresividad proveniente del concepto reivindicativo del álbum (se ha dicho que es un álbum político, lo cual podría se cierto aunque lo sea un nivel abstracto). Dicho de otro modo, el folk de “White Chalk” era más para dentro, intimista, mientras el de “Let England Shake” es más para afuera, entroncando con la idea de la canción tradicional dirigida a mover al Pueblo. Musicalmente eso se traduce en unas composiciones menos desnudas (aunque también las haya como “all and everyone”, “England”...) donde el piano cede protagonismo a la electricidad y la percusión para acercarse al rock clásico (folk electrificado) que remueve entrañas como lo entienden TOM WAITS o PATII SMITH (a la que casi suplanta en “The Last Living Rose”). Luego está esa voz suya, que se transforma en cada canción como una actriz cambia de registro según se lo requiera cada película.

En definitiva, un disco sólido como una roca, si bien variado en tonos y atmósferas. Todas las piezas me gustan, pero destaco “The Glorious Land” donde simplemente hace magia: ¿Cómo se puede conseguir tanto con elementos tan básicos y usuales?. También “Written on the Forehead” por su originalidad. Lo dicho, PJ HARVEY lo ha vuelto a hacer, uno de los discos del año seguro.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio